Después de seis meses de estancamiento, Wall Street está reactivando su apetito por la financiación de nuevas granjas eólicas.
Morgan Stanley y Citigroup Inc. invirtieron en agosto US$100 millones cada uno para financiar proyectos eólicos separados, aprovechando un programa del gobierno estadounidense que ofrece subsidios significativos para ayudar a cubrir los costos de inversiones en energía renovable.
Los banqueros dicen que este es el inicio de una ola de nueva financiación en el sector, así como inversiones en grandes instalaciones solares y plantas de energía geotérmica. Parece que los impulsores de los proyectos y Wall Street ven el programa de subsidio estatal como un buen negocio y puede que crezca mucho más de lo que los creadores en Washington esperaban, prevén algunos expertos.
"El dinero está regresando", dice Ethan Zindler, director de investigación en América del Norte para la firma de consultoría New Energy Finance Ltd.
Bajo el programa, el gobierno estadounidense dará un reembolso de 30% del costo de construir una planta de energía renovable. El dinero será entregado 60 días después de que una solicitud haya sido aprobada. Los inversionistas también reciben deducciones por depreciación aceleradas, lo cual ayuda a compensar los impuestos.
Los departamentos de Energía y del Tesoro de Estados Unidos han dicho que prevén gastar US$3.000 millones en el programa, que empezó el 31 de julio y estará vigente hasta finales de 2010 como parte del paquete de estímulo económico. En la primera ronda, el gobierno informó que concedió US$502 millones en subsidios a 12 proyectos.
Algunos banqueros esperan que las solicitudes asciendan a US$10.000 millones, basados en las proyecciones de instalaciones de energía eólica. "Vemos oportunidades y estamos yendo tras ellas de forma muy activa", dice Kevin Walsh, director administrativo de GE Energy Financial Services, una filial de General Electric Co., que ha sido un financista importante de acuerdos de energía eólica.
El fuerte interés hace eco del programa del gobierno estadounidense de "efectivo por chatarra" que proveyó US$3.000 millones en incentivos para intercambiar autos viejos de alto consumo de combustible por vehículos nuevos y que rápidamente fue abrumado por la demanda. "Nos preocupa que esto se convierta en un nuevo 'efectivo por chatarra'", dice un vocero del congresista de California Darrell Issa.
Sin embargo, a diferencia del programa "efectivo por chatarra", no existe un límite en los subsidios de energía renovable y el gobierno estadounidense se ha comprometido a gastar lo que sea necesario para mantener el flujo de inversión hacia el sector.
Los nuevos subsidios ofrecen el potencial de ganancias atractivas. Varios banqueros prevén que los acuerdos generen un rendimiento anual de entre 9% y 15%.
Se espera que buena parte de la inversión vaya hacia proyectos eólicos debido a que la industria es más madura y está en una mejor posición para captar fondos limitados.
Incluso Citigroup, el gigante financiero que ha sufrido problemas de capital, ha sido atraído por la energía eólica. La entidad invirtió en agosto US$120 millones en una granja eólica bajo construcción en la región norte del estado de Pensilvania. El proyecto, llamado Armenia Mountain y desarrollado por AES Corp., generará cerca de 100,5 megavatios a través de 67 turbinas eólicas, cada una del tamaño de un edificio de 20 pisos.
Los rápidos rendimientos generados por los subsidios "hicieron la energía eólica una opción de inversión atractiva", dice Sawndip Sen, director global de energía alternativa en Citi.
No sólo son los bancos de Wall Street los que han detectado la oportunidad. Iberdrola SA, la empresa española líder en energía renovable por capacidad instalada, informó en julio que espera captar US$500 millones en subsidios gubernamentales para proyectos eólicos en EE.UU. En la primera ronda, fue la firma que más captó recursos: US$294 millones para cinco proyectos. "Hemos estado en contacto con el Departamento del Tesoro y creemos que los US$3.000 millones es como lo mínimo necesario", dijo Ralph Curry, presidente de la filial estadounidense de Iberdrola.
La financiación adicional de los subsidios posiblemente beneficiará a importantes desarrolladores de granjas eólicas como la empresa de servicios públicos de Florida FPL Group Inc. y el fabricante de instalaciones solares Edison International. También podría dar un impulso a los fabricantes de rotores de turbinas y paneles solares, como Vestas Wind Systems A/S y First Solar Inc. Además, el gobierno informó que esa primera ronda de subsidios generará 2.000 empleos.
Morgan Stanley y Citigroup Inc. invirtieron en agosto US$100 millones cada uno para financiar proyectos eólicos separados, aprovechando un programa del gobierno estadounidense que ofrece subsidios significativos para ayudar a cubrir los costos de inversiones en energía renovable.
Los banqueros dicen que este es el inicio de una ola de nueva financiación en el sector, así como inversiones en grandes instalaciones solares y plantas de energía geotérmica. Parece que los impulsores de los proyectos y Wall Street ven el programa de subsidio estatal como un buen negocio y puede que crezca mucho más de lo que los creadores en Washington esperaban, prevén algunos expertos.
"El dinero está regresando", dice Ethan Zindler, director de investigación en América del Norte para la firma de consultoría New Energy Finance Ltd.
Bajo el programa, el gobierno estadounidense dará un reembolso de 30% del costo de construir una planta de energía renovable. El dinero será entregado 60 días después de que una solicitud haya sido aprobada. Los inversionistas también reciben deducciones por depreciación aceleradas, lo cual ayuda a compensar los impuestos.
Los departamentos de Energía y del Tesoro de Estados Unidos han dicho que prevén gastar US$3.000 millones en el programa, que empezó el 31 de julio y estará vigente hasta finales de 2010 como parte del paquete de estímulo económico. En la primera ronda, el gobierno informó que concedió US$502 millones en subsidios a 12 proyectos.
Algunos banqueros esperan que las solicitudes asciendan a US$10.000 millones, basados en las proyecciones de instalaciones de energía eólica. "Vemos oportunidades y estamos yendo tras ellas de forma muy activa", dice Kevin Walsh, director administrativo de GE Energy Financial Services, una filial de General Electric Co., que ha sido un financista importante de acuerdos de energía eólica.
El fuerte interés hace eco del programa del gobierno estadounidense de "efectivo por chatarra" que proveyó US$3.000 millones en incentivos para intercambiar autos viejos de alto consumo de combustible por vehículos nuevos y que rápidamente fue abrumado por la demanda. "Nos preocupa que esto se convierta en un nuevo 'efectivo por chatarra'", dice un vocero del congresista de California Darrell Issa.
Sin embargo, a diferencia del programa "efectivo por chatarra", no existe un límite en los subsidios de energía renovable y el gobierno estadounidense se ha comprometido a gastar lo que sea necesario para mantener el flujo de inversión hacia el sector.
Los nuevos subsidios ofrecen el potencial de ganancias atractivas. Varios banqueros prevén que los acuerdos generen un rendimiento anual de entre 9% y 15%.
Se espera que buena parte de la inversión vaya hacia proyectos eólicos debido a que la industria es más madura y está en una mejor posición para captar fondos limitados.
Incluso Citigroup, el gigante financiero que ha sufrido problemas de capital, ha sido atraído por la energía eólica. La entidad invirtió en agosto US$120 millones en una granja eólica bajo construcción en la región norte del estado de Pensilvania. El proyecto, llamado Armenia Mountain y desarrollado por AES Corp., generará cerca de 100,5 megavatios a través de 67 turbinas eólicas, cada una del tamaño de un edificio de 20 pisos.
Los rápidos rendimientos generados por los subsidios "hicieron la energía eólica una opción de inversión atractiva", dice Sawndip Sen, director global de energía alternativa en Citi.
No sólo son los bancos de Wall Street los que han detectado la oportunidad. Iberdrola SA, la empresa española líder en energía renovable por capacidad instalada, informó en julio que espera captar US$500 millones en subsidios gubernamentales para proyectos eólicos en EE.UU. En la primera ronda, fue la firma que más captó recursos: US$294 millones para cinco proyectos. "Hemos estado en contacto con el Departamento del Tesoro y creemos que los US$3.000 millones es como lo mínimo necesario", dijo Ralph Curry, presidente de la filial estadounidense de Iberdrola.
La financiación adicional de los subsidios posiblemente beneficiará a importantes desarrolladores de granjas eólicas como la empresa de servicios públicos de Florida FPL Group Inc. y el fabricante de instalaciones solares Edison International. También podría dar un impulso a los fabricantes de rotores de turbinas y paneles solares, como Vestas Wind Systems A/S y First Solar Inc. Además, el gobierno informó que esa primera ronda de subsidios generará 2.000 empleos.
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