WASHINGTON (Dow Jones)
El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Timothy Geithner, en cartas enviadas a legisladores, delineó el miércoles la estrategia de salida de los programas de fondos de rescate del Gobierno, la que incluye una extensión del Programa de Ayuda para Activos en Problemas, o TARP, por US$700.000 millones.
Geithner indicó que el TARP se extenderá hasta el 3 de octubre de 2010. "Si bien estamos extendiendo el programa de US$700.000 millones, no prevemos utilizar más de US$550.000 millones", señaló el funcionario de Gobierno en cartas enviadas a la presidenta de la Cámara baja, Nancy Pelosi - demócrata por California-, al líder de la mayoría en el Senado, Harry Reid -demócrata por Nevada- y a otros cuatro legisladores.
Además, el Programa de Compras de Capital, bajo el cual el Gobierno inyectó fondos a los bancos estadounidenses a cambio de acciones preferentes, está "efectivamente cerrado", señalan las misivas. Sin embargo, Geithner sostuvo que el Tesoro continuará proporcionando capital a bancos pequeños y comunitarios.
El Tesoro finalmente terminó con un límite de gastos de US$698.700 millones para el programa TARP. Los fondos del paquete de rescate fueron desviados al fondo National Housing Trust Fund.
De los US$698.700 millones, el Tesoro ha firmado contratos que comprometen US$472.510 millones a varias instituciones, en su mayoría bancos que participan en un programa a través del cual el Gobierno canjea capital por acciones preferentes, dividendos y títulos opcionales de compra.
Ese programa ha registrado los mayores desembolsos del Tesoro, pero también los mayores ingresos. Mientras el Tesoro ha canalizado más de US$204.70 millones, los pagos anticipados dejan sólo US$133.70 millones en capital pendiente del Gobierno.
Geithner reiteró que el departamento probablemente tendrá un rendimiento positivo sobre las inversiones bancarias del Gobierno y, en total, espera "recuperar la totalidad, excepto US$42.000 millones, de los US$364.00 millones en fondos TARP desembolsados en el año fiscal 2009".
El Tesoro anticipa que recibirá hasta US$175.000 millones en devoluciones del TARP para fines del próximo año.
Los desembolsos totales del programa TARP ascendían a US$366.360 millones a fines de octubre, una cifra que también refleja miles de millones de dólares en ayuda a automotrices estadounidenses y a American International Group, así como gastos de incentivos destinados a generar modificaciones en los créditos hipotecarios y la participación del Gobierno en un programa de inversiones público-privado.
El Tesoro indicó que podría aumentar su compromiso con la Línea de Crédito para Valores Respaldados por Activos a Plazo, o TALF, cuyo objeto es estimular el gasto de consumo, pero que no espera que ello represente un costo adicional para los contribuyentes. El Gobierno también tiene planes de usar fondos del TARP para mitigar las ejecuciones hipotecarias. El Tesoro asignó US$20.000 millones para el programa TALF.
La estrategia final de salida del departamento consiste en la forma en que planea administrar las inversiones de capital que adquirió por medio de la ayuda gubernamental a empresas estadounidenses. "Continuaremos administrando esas inversiones de una manera comercial e intentaremos dejarlas tan pronto sea factible", sostuvo Geithner en las cartas.
Geithner advirtió a los legisladores que aún persisten grandes desafíos. El secretario del Tesoro presentó una lista de problemas que incluye un aumento de las ejecuciones hipotecarias, alta tasa de desempleo, débil confianza empresarial y de los consumidores, escaso crédito bancario y pérdidas relacionadas con bienes raíces comerciales.
Además, el sistema financiero no se ha recuperado totalmente, dijo Geithner. "Y golpes de corto plazo a ese sistema podrían socavar la recuperación económica que hemos observado hasta ahora", agregó. Geithner indicó que el TARP se prorrogará hasta el 3 de octubre de 2010. "Si bien estamos sobrepasando el programa de US$700.000 millones, no prevemos el despliegue de más de US$550.000 millones", sostuvo el funcionario de Gobierno en cartas enviadas a la presidenta de la Cámara baja, Nancy Pelosi —demócrata por el estado de California— y al líder de la mayoría en el Senado, Leader Harry Reid, demócrata por el estado de Nevada.
Además, el Programa de Compras de Capital está "efectivamente cerrado", señalan las misivas.
El Tesoro indicó que podría aumentar su compromiso con la Línea de Crédito para Valores Respaldados por Activos a Plazo, o TALF, pero que no espera que ello represente un costo adicional para los contribuyentes.
La estrategia final de salida del departamento consiste en la forma en que planea administrar las inversiones de capital que adquirió por medio de la ayuda gubernamental a empresas estadounidenses. "Continuaremos administrando esas inversiones de una manera comercial e intentaremos dejarlas tan pronto sea factible", sostuvo Geithner en las cartas.
Geithner indicó que el TARP se extenderá hasta el 3 de octubre de 2010. "Si bien estamos extendiendo el programa de US$700.000 millones, no prevemos utilizar más de US$550.000 millones", señaló el funcionario de Gobierno en cartas enviadas a la presidenta de la Cámara baja, Nancy Pelosi - demócrata por California-, al líder de la mayoría en el Senado, Harry Reid -demócrata por Nevada- y a otros cuatro legisladores.
Además, el Programa de Compras de Capital, bajo el cual el Gobierno inyectó fondos a los bancos estadounidenses a cambio de acciones preferentes, está "efectivamente cerrado", señalan las misivas. Sin embargo, Geithner sostuvo que el Tesoro continuará proporcionando capital a bancos pequeños y comunitarios.
El Tesoro finalmente terminó con un límite de gastos de US$698.700 millones para el programa TARP. Los fondos del paquete de rescate fueron desviados al fondo National Housing Trust Fund.
De los US$698.700 millones, el Tesoro ha firmado contratos que comprometen US$472.510 millones a varias instituciones, en su mayoría bancos que participan en un programa a través del cual el Gobierno canjea capital por acciones preferentes, dividendos y títulos opcionales de compra.
Ese programa ha registrado los mayores desembolsos del Tesoro, pero también los mayores ingresos. Mientras el Tesoro ha canalizado más de US$204.70 millones, los pagos anticipados dejan sólo US$133.70 millones en capital pendiente del Gobierno.
Geithner reiteró que el departamento probablemente tendrá un rendimiento positivo sobre las inversiones bancarias del Gobierno y, en total, espera "recuperar la totalidad, excepto US$42.000 millones, de los US$364.00 millones en fondos TARP desembolsados en el año fiscal 2009".
El Tesoro anticipa que recibirá hasta US$175.000 millones en devoluciones del TARP para fines del próximo año.
Los desembolsos totales del programa TARP ascendían a US$366.360 millones a fines de octubre, una cifra que también refleja miles de millones de dólares en ayuda a automotrices estadounidenses y a American International Group, así como gastos de incentivos destinados a generar modificaciones en los créditos hipotecarios y la participación del Gobierno en un programa de inversiones público-privado.
El Tesoro indicó que podría aumentar su compromiso con la Línea de Crédito para Valores Respaldados por Activos a Plazo, o TALF, cuyo objeto es estimular el gasto de consumo, pero que no espera que ello represente un costo adicional para los contribuyentes. El Gobierno también tiene planes de usar fondos del TARP para mitigar las ejecuciones hipotecarias. El Tesoro asignó US$20.000 millones para el programa TALF.
La estrategia final de salida del departamento consiste en la forma en que planea administrar las inversiones de capital que adquirió por medio de la ayuda gubernamental a empresas estadounidenses. "Continuaremos administrando esas inversiones de una manera comercial e intentaremos dejarlas tan pronto sea factible", sostuvo Geithner en las cartas.
Geithner advirtió a los legisladores que aún persisten grandes desafíos. El secretario del Tesoro presentó una lista de problemas que incluye un aumento de las ejecuciones hipotecarias, alta tasa de desempleo, débil confianza empresarial y de los consumidores, escaso crédito bancario y pérdidas relacionadas con bienes raíces comerciales.
Además, el sistema financiero no se ha recuperado totalmente, dijo Geithner. "Y golpes de corto plazo a ese sistema podrían socavar la recuperación económica que hemos observado hasta ahora", agregó. Geithner indicó que el TARP se prorrogará hasta el 3 de octubre de 2010. "Si bien estamos sobrepasando el programa de US$700.000 millones, no prevemos el despliegue de más de US$550.000 millones", sostuvo el funcionario de Gobierno en cartas enviadas a la presidenta de la Cámara baja, Nancy Pelosi —demócrata por el estado de California— y al líder de la mayoría en el Senado, Leader Harry Reid, demócrata por el estado de Nevada.
Además, el Programa de Compras de Capital está "efectivamente cerrado", señalan las misivas.
El Tesoro indicó que podría aumentar su compromiso con la Línea de Crédito para Valores Respaldados por Activos a Plazo, o TALF, pero que no espera que ello represente un costo adicional para los contribuyentes.
La estrategia final de salida del departamento consiste en la forma en que planea administrar las inversiones de capital que adquirió por medio de la ayuda gubernamental a empresas estadounidenses. "Continuaremos administrando esas inversiones de una manera comercial e intentaremos dejarlas tan pronto sea factible", sostuvo Geithner en las cartas.
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