Lisboa, jun (EFECOM).- La agencia Moody's decidió hoy mantener las calificaciones de los principales bancos portugueses, aunque seguirán en observación para una posible rebaja que sólo aplicó hoy a la estatal Caixa Geral de Depósitos (CGD).
Tras concluir la primera parte del análisis que inició el pasado 5 de mayo, la agencia de calificación optó por mantener el perfil financiero de siete entidades pero con la posibilidad de una rebaja a esos y otros bancos condicionada a la calificación que se dé al país y la respuesta de las entidades a la crisis.
La CGD fue la única que sufrió un descenso, a D+, como consecuencia de la desconfianza ante la evolución de la rentabilidad de este banco público y la presión que sufre por la crisis económica.
Según el análisis de Moody's las entidades portuguesas, pese a su dependencia de la financiación externa, tienen capacidad para aguantar un año sin recursos internacionales, haciendo uso de la liquidez de sus activos actuales y aumentando la dependencia del Banco Central Europeo.
Entre los bancos que mantienen la calificación bajo vigilancia están las mayores entidades lusas, como el Banco Comercial Portugués (BCP), el Espíritu Santo (BES), el Banco Portugués de Inversiones (BPI), el Santander Totta y el Itau Europa, aunque éste último tiene para Moody's la ventaja del respaldo de su matriz brasileña.
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