Las fuerzas de seguridad sirias vetaron a los manifestantes heridos el acceso a los hospitales e impidieron que los servicios sanitarios les atencieran en dos protestas celebradas el pasado viernes, según denuncia Human Right Watch.
Policías arrastran el cuerpo de un manifestante.
Reuters HRW, que cita hasta 20 testigos de tres localidades sirias, pidió a las autoridades que permitan el acceso médico para los manifestantes heridos y que detengan el injustificado uso de la fuerza contra las personas que se concentran en favor de reformas democráticas.
La directora en Oriente Próximo para Human Rights Watch, Sarah Leah Whitson, aseguró que "impedir que las personas heridas tengan tratamiento médico que pueda salvarles la vida es inhumano e ilegal".
"Apartar a las personas de los necesarios cuidados médicos provoca un terrible sufrimiento y quizás, un daño irreparable", añadió.
Human Rights Watch consiguió el testimonio de seis testigos en Deraa, 10 de Harasta, y cuatro de Douma, donde se produjeron manifestaciones el pasado viernes.
El grupo al que ha tenido acceso la organización está formado por cuatro médicos, cuatro heridos en las protestas, manifestantes detenidos y familiares de los heridos.
Además, Human Rights Watch confirmó la muerte de 28 personas en esas tres localidades.
Los grupos de Derechos Humanos en el país aseguraron que sólo en Deraa habían muerto 27 personas y que en Douma se había informado de otra muerte.
El viernes también hubo protestas en Qamishli, Derbassiye, Banyas, Amuda, Homs, Latakia, Tartous y Arbeen, aunque la organización no ha podido confirmar el número de muertes de forma fiable.
Martes "de la lealtad a los mártires"
Precisamente este martes, el grupo opositor 'La Revolución Siria', uno de los más activos en las protestas, ha convocado manifestaciones en todo el país en lo que ha bautizado como "el martes de la lealtad a los mártires". "El martes saldremos por lealtad a todos los mártires y a los detenidos, por lealtad a nuestras exigencias pacíficas que pedimos desde el primer día de la revolución", asegura un breve comunicado de este grupo colgado en su página web en la red social de Facebook.
Las protestas tendrán lugar en todas las provincias del país para: "decir que continuamos, que no hay vuelta atrás. Queremos nuestra libertad y (que se satisfagan) nuestras exigencias".
Las manifestaciones en Siria, que comenzaron tímidamente en febrero y que se intensificaron a partir del 18 de marzo, han sido duramente reprimidas por el régimen sirio que responsabiliza a grupos armados no identificados de matar a civiles y miembros de las fuerzas de seguridad.
Según varias ONG, hasta 200 personas han muerto en estas protestas, que hasta ahora solían convocarse los viernes después de la oración o coincidiendo con los entierros de los manifestantes asesinados.
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